El valle del Viento Helado, libro 3. La gema del halfling
Con La gema del halfling llegamos al final de la trilogía El valle del Viento Helado, que, como ya comenté en reseñas anteriores, fue la primera trilogía que se publicó de las aventuras de Drizzt Do´Urden y sus compañeros. Si bien entre las dos primeras, La piedra de cristal y Ríos de plata apenas existe relación argumental, más allá de que son los mismos protagonistas y de que se suceden cronológicamente hablando, La gema del halfling es una continuación directa de los acontecimientos narrados en Ríos de plata, y resuelve cuestiones que se iniciaron en aquella, la segunda novela de la trilogía. El villano principal, además, es el mismo: Entreri, el asesino que persiguió a Regis y que secuestró a Catti-Brie en Ríos de plata. Hay que admitir, no obstante, que, al igual que sucede en el resto de la trilogía, La gema del halfling no es una novela que destaque por su trama, que ofrece una historia sencilla y sin pretensiones, sino más bien por sus personajes y por las relaciones entre estos.

La historia de La gema del halfling tiene su inicio inmediatamente a continuación del final de Ríos de plata. Después de que los compañeros se enfrentasen a Entreri y a un dragón, el asesino logró escapar, llevándose consigo al halfling y a la estatuilla de la pantera de Drizzt. Con Bruenor supuestamente muerto durante la batalla contra el dragón, Drizzt y Wulfgar deciden perseguir al asesino para así rescatar a su amigo, mientras Catti-Brie, a quien de nuevo (y tristemente) dejan atrás, reúne aliados para reclamar el antiguo hogar de su padre adoptivo en nombre de este; un lugar ahora plagado de enanos grises. Así empieza una persecución, la de Entreri, que lleva al bárbaro y al drow por medio mundo, viaje que les hará encontrar por el camino tanto aliados como nuevos enemigos, todo para rescatar al ladronzuelo, tarea no exenta de grandes dificultades. ¡Por suerte para ellos, Bruenor y Catti-Brie encuentran la forma de reunirse con ellos a mitad del viaje!
Si La piedra de cristal ponía el foco en Wulfgar como pretendido protagonista, y en Ríos de plata veíamos la interesante evolución que sufría Catti-Brie, quien pasaba de ser dama en apuros a convertirse en un igual de sus compañeros, en La gema del halfling podemos ver que, al fin, Drizzt Do´Urden consigue encontrar la paz que durante tanto tiempo le ha sido esquiva, y lo hace indudablemente gracias a sus buenos amigos, y en especial gracias a Catti-Brie, el otro de los cinco personajes que sufre una asombrosa evolución y que pasa de ser un personaje secundario y potencial dama en apuros (primera mitad de la trilogía) a alzarse como una mujer capaz de cuidarse sola y a codearse de igual a igual con los demás (segunda mitad de la trilogía). En el caso de Regis y Bruenor no podemos decir que haya una evolución destacada, ya que ambos personajes se mantienen bastante similares a lo largo de toda la trilogía, mientras que, finalmente, Wulfgar es un personaje que va de más a menos; de pretendido héroe protagonista a uno más entre sus amigos, frecuentemente eclipsado por un Drizzt Do´Urden que, contra todo pronóstico, se convierte en el protagonista principal de la saga por derecho propio. Y digo contra todo pronóstico porque eso no era lo que su autor pretendía, ya que Salvatore tenía la intención de que fuese al revés: Wulfgar el gran protagonista y Drizzt el compañero secundario. Los personajes, sin embargo, a menudo tienen ideas propias, y así se lo hacen saber a sus escritores.
Hemos llegado al final del principio de la leyenda de Drizzt Do´Urden, ¡pero todavía nos quedan unas dos docenas de novelas por delante, sin contar todas las que aún no se han escrito!
JOAQUÍN SANJUÁN