Las aventuras de Gotrek y Félix: Matagigantes
Autor: William King
ISBN: 978-84-480-3330-9
Fecha de publicación: 30/09/2003
P.V.P.: 10´95 €
Llegamos al final de la etapa de Las aventuras de Gotrek y Félix escrita por William King, indudable responsable del gran éxito que consiguió dicha serie durante su publicación. Si analizamos el conjunto de las siete novelas firmadas por el autor, y tal y como ya vimos de forma desglosada en reseñas anteriores, hubo una evolución estructural desde Matatrolls, la primera novela de la serie, hasta la que nos ocupa, Matagigantes. Recordemos que en Matatrolls encontramos una serie de relatos independientes, mientras que en Mataskavens, la segunda novela, encontramos varios capítulos largos que funcionan como relatos, pero que en conjunto dan forma a una sola historia. Esto cambió radicalmente en Matademonios, la tercera novela, así como en las siguientes: Matadragones, Matabestias y Matavampiros. Estas cuatro novelas funcionan como una única historia dividida en cuatro partes (cada una de las novelas), pero con una continuidad clara entre unas y otras, y cuentan con una serie de personajes secundarios bien conocidos por los aficionados a Warhammer Fantasy: el matador Snorri Muerdenarices, la joven kislevita Ulrika o el poderoso mago dorado Max Schreiber. Sorprendentemente, Matagigantes rompe con todo eso, y, tras unos capítulos que bien pueden servir como epílogo a la etapa que va desde Mataskavens a Matavampiros, el autor establece un claro punto y aparte tras el que cuenta su última historia de Gotrek y Félix, en la que además aparece el mago alto elfo Teclis como personaje invitado.

Si bien desconozco los motivos que llevaron a William King a crear semejante ruptura entre Matagigantes y sus novelas anteriores, el hecho de que lo hiciese de forma tan tajante, así como que la novela transcurra precisamente en Albión (dos años antes de la publicación de Matagigantes, en Warhammer Fantasy (el juego de miniaturas) había comenzado una campaña centrada precisamente en Albión) y que aparezca de invitado un personaje tan popular como siempre ha sido Teclis, me llevan a pensar que fueron decisiones editoriales las que empujaron al autor en esa dirección, probablemente con la fines comerciales y de marketing, para aprovechar el tirón de la campaña del juego de miniaturas. El hecho de que William King dejase la serie después de ese libro, me hace sospechar que el autor no se tomó demasiado bien las interferencias en la serie. Resulta llamativo que no solo dejase esa serie, sino que dejó incluso de trabajar para Games Workshop. Si bien nunca se han conocido los motivos de todo esto, los indicios son suficientes para pensar, como digo, en imposiciones creativas que gustaron poco o nada al escritor.
Matagigantes, después de cerrar la trama que William King había desarrollado desde Matadragones hasta Matavampiros, nos muestra cómo Gotrek y Félix son transportados mágicamente hasta Albión, dejando atrás a los compañeros que les habían acompañado durante cuatro novelas, y de los que no se vuelve a saber nada en la novela. En Albión se encuentran con el mago alto elfo Teclis, y, pese a los roces entre elfo y enano, los tres héroes se ven obligados a trabajar juntos para contener una peligrosa amenaza que podría condenar todo el mundo. Cabe señalar que la presencia de un gigante de Albión entre los enemigos no parece más que una excusa para poder titular a la novela como se titula, ya que la criatura aparece tan solo durante un puñado de páginas, mientras que el auténtico enemigo son los dos hermanos hechiceros y adoradores del Caos que ya pudimos ver durante Matabestias, en el asedio de Praag. Estos son, además, el último vínculo de Gotrek y Félix con todo lo narrado entre Matadragones y Matavampiros. Al final del libro, con la amenaza resuelta, William King deja a los dos protagonistas en la lejana Albión, con todos sus vínculos rotos, y preparados para iniciar un nuevo camino en la siguiente novela, Mataorcos, pero esta vez con Nathan Long como autor.
JOAQUÍN SANJUÁN