Leyendas de la Dragonlance, libro 3. El Umbral del Poder

08.12.2025

La trilogía Leyendas de la Dragonlance, segunda serie más importante de la gran saga Dragonlance, concluye con esta tercera novela, El umbral del poder. En ella podemos asistir al acto final de la gran epopeya de Raistlin Majere, decidido a penetrar en el mismísimo Abismo, a enfrentarse a la mismísima Reina de la Oscuridad y a convertirse nada menos que en un nuevo dios. Tras él, ya desde el primer libro de la trilogía, van su mellizo Caramon Majere y el kender Tas, ambos con la noble intención de salvarlo de sí mismo. La serie, con los dos hermanos como claros protagonistas, ofrece un doble arco que llega a su conclusión en esta novela. Por un lado, el ambicioso objetivo de Raistlin Majere de alzarse como dios. Por otro, el camino del héroe que recorre Caramon Majere desde la primera novela de las Leyendas de la Dragonlance, un camino que el antiguo Héroe de la Lanza comienza en un estado lamentable, hundido tras la marcha de su hermano al final de las Crónicas de la Dragonlance, y convertido en adicto al alcohol y a la comida, una burla del hombre que sus amigos y su esposa Tika conocieron años atrás.  

En este tercer libro nos encontramos a Tas y a Caramon después de que, al final de la segunda novela, se vieran arrojados al futuro por un choque de poderes mágicos. Lamentablemente, ese futuro muestra a un Raistlin Majere que ha triunfado en su propósito... y que ha acabado con el mundo al alzarse victorioso. Decididos a evitar la catástrofe, resuelven buscar la forma de regresar a su tiempo para detener al hechicero antes de que sea demasiado tarde...

Pero Caramon y Tas no son los únicos implicados en los terribles acontecimientos de las Leyendas de la Dragonlance. Tanis el Semielfo, otro de los Héroes de la Lanza que han sobrevivido a los sucesos anteriores a los aquí narrados, vuelve a escena después de su breve aparición en El Templo de Istar, la primera novela de esta trilogía. Alguien debe detener no solo a Raistlin, sino también a su hermanastra Kitiara Uth Matar, quien arroja su ejército, dragones incluidos, contra aquellos que quieren oponerse al nigromante, a fin de apoyarle mientras se enfrenta a la Reina de la Oscuridad. El reencuentro de los dos antiguos amantes, sin embargo, no es lo que ninguno de ellos esperaba.  

El sobresaliente arco de Caramon Majere llega a su final en esta novela, con el héroe plantando cara a su propio hermano, al interponerse entre él y la Reina de la Oscuridad en el mismísimo Abismo. El héroe, que inició la serie como un esperpento y un desecho humano, ha realizado su peculiar viaje del héroe a través del tiempo, y se ha convertido en la mejor versión de sí mismo, tal y como el propio Tanis el Semielfo apunta. De forma paralela nos encontramos con Raistlin Majere, que, más que un viaje del héroe, realiza una conversión y una caída en picado. Poco o nada queda en él del hombre que conocimos en las Crónicas de la Dragonlance, el taimado e inteligente hechicero que en más de una ocasión salvó a sus compañeros. Desbordado por sus ansias de poder, y de forma opuesta a lo que sucede con su mellizo, Raistlin Majere se ve arrastrado por la peor versión de sí mismo, hasta el punto de cometer errores que él jamás habría cometido. Sin embargo, la cuestión de fondo es si el ladino y maquiavélico hechicero será capaz de encontrar la redención por sus actos, o si su camino está condenado a terminar en la más profunda y terrible oscuridad.

JOAQUÍN SANJUÁN