Thor: Love & Thunder

18.07.2022

El dios del trueno de Marvel, el primero de los personajes de la Casa de las Ideas en alcanzar las cuatro películas en solitario, ha sido probablemente uno de los superhéroes del Universo Cinematográfico Marvel que más cambios han sufrido desde su inicio. La nueva versión de Thor que se nos presenta en Thor: Love & Thunder es curiosamente una versión que parece fusionar al Thor clásico y al, digamos, Thor con escaso sentido del ridículo que pudimos ver en Thor Ragnarok y en Avengers Endgame. Veamos un breve repaso a las películas en las que Chris Hemsworth interpreta al hijo predilecto de Odín.  

Thor
Thor

THOR (2011) presentó una primera versión del personaje, versión que resulta la más próxima al personaje de los cómics de todas las que hemos podido ver en la gran pantalla. Se trataba de un Thor serio y arrogante; un dios del trueno que, precisamente por su arrogancia, es castigado por Odín y, tras ser despojado de sus poderes, es enviado a Midgard, junto a los mortales, para que aprenda humildad. Si bien este argumento resulta muy fiel a la historia del Thor de los cómics, y pese a que la película resultó correcta en términos generales, resultó algo descafeinada. Acompañaban a Chris Hemsworth actores tan notables como Natalie Portman en el papel de Jane Foster, Anthony Hopkins como Odín y la revelación que fue Tom Hiddleston como Loki.

LOS VENGADORES (2012). El Thor de Los Vengadores fue el mismo que pudimos ver en la primera película. Eclipsado por Ironman (Robert Downey Jr.), Nick Fury (Samuel L. Jackson) y el propio Loki (Tom Hiddleston) no fue precisamente uno de los personajes que más brillaron en la película, pese a que su papel en la misma resulto más que satisfactorio.

Thor: The Dark World
Thor: The Dark World

THOR: THE DARK WORLD (2013), la secuela de Thor (2011), bebe directamente de la primera película y ofrece al espectador un fascinante mundo que combina fantasía y ciencia ficción, mundo más próximo a la épica fantástica que al género de superhéroes. Y es que no hay que olvidar que Thor puede ser un vengador, pero es ante todo un dios de la mitología nórdica, y por eso brilla cuando se le introduce en un contexto de fantasía. Sin embargo, la película contaba con serios problemas, empezando con una trama tremendamente floja y con algunos actores, como Natalie Portman (Jane Foster) o el ex Doctor Who Cristopher Eccleston (Malekith) que hicieron las que probablemente fuesen algunas de las peores interpretaciones de sus respectivas carreras.

LOS VENGADORES: LA ERA DE ULTRÓN (2015), la más floja de las películas de Los Vengadores, muestra a un Thor en horas bajas después de que Thor: The Dark World se convirtiese en una de las peores películas de Marvel hasta el momento.

DOCTOR STRANGE (2016). Si bien fue solo un cameo en una escena post-créditos, vale la pena mencionar esta aparición de Thor, pues fue la última película en la que pudimos ver al personaje clásico y más próximo a la versión de los cómics.

THOR: RAGNAROK (2017). Se trata de una de las películas de Marvel más controvertidas hasta la fecha. En ella el director Taika Waititi transforma por completo no solo a Thor, sino también su propio universo. Desde la muerte de Odín hasta la destrucción de Mjolnir y de la propia Asgard, pasando por la aparición de Hela (Cate Blanchett) como villana y hermana de Odín y Loki, así como por una terriblemente decepcionante (y extremadamente libre) adaptación de Planet Hulk y una completa transformación sufrida por Thor, que parece ser poseído por el espíritu de Star-Lord, Thor: Ragnarok ha causado un cisma entre los seguidores del UCM, divididos entre aquellos que adoran esta película y aquellos (entre los que me incluyo) a los que le parece una aberración indigna de un personaje de la talla de El Poderoso Thor. 

Thor llega a Wakanda en Los Vengadores: Infinity War
Thor llega a Wakanda en Los Vengadores: Infinity War

LOS VENGADORES: INFINITY WAR (2018). La que es indiscutiblemente una de las mejores películas del UCM cogió al Thor festival-del-humor de Thor: Ragnarok y lo convirtió de nuevo en el personaje épico y poderoso que siempre debió ser, hasta el punto de que el suyo es muy probablemente el Thor más épico y... y más Thor de todos los que hemos visto en las diferentes películas. La escena en la que aparece en Wakanda para unirse en la batalla contra Thanos, después de realizar su propio viaje del héroe en busca de un arma capaz de vencer al titán, es uno de los momentos de mayor épica de todo el UCM.

LOS VENGADORES: ENDGAME (2019) volvió a convertir a Thor en un chiste, aunque en uno muy distinto del de Thor: Ragnarok. Afectado por los acontecimientos de la película anterior, Thor se da a la mala vida, así como a la comida y a la bebida. El resultado, un personaje que da vergüenza ajena y que en poco o nada se parece al dios del trueno, tan solo es capaz de recuperar una pizca de su esencia en la batalla final contra Thanos. Sin embargo, en general deja tan solo una versión de Thor para olvidar.  


THOR: LOVE & THUNDER (2022)

Llegamos finalmente a la película de la que queríamos hablar; la cuarta película del dios del trueno en solitario. Debo confesar que, después de Thor: Ragnarok, fui a ver esta cuarta entrega con pocas esperanzas, pues no esperaba otra cosa que más del mismo despropósito que Taika Waititi nos ofreció en la anterior película. Pese a todo quería verla, pues la película recogía dos extraordinarios arcos argumentales de los cómics, ambos de la etapa de Jason Aaron, etapa que se encuentra entre las mejores publicadas del dios del trueno.

Seamos claros: sí, hay un exceso de humor estúpido. Eso es así. ¿Qué problema tienes, Taika Waititi? ¿Qué te pasa? ¿Estás bien? Debo decir, sin embargo, que ese exceso resulta mucho más soportable que en Thor: Ragnarok, y que incluso los chistes dejan de ser tan zafios y burdos como entonces. Algo es algo, ¿verdad?

Una vez pasamos la primera parte de la película, esa en la que Thor aparece acompañado por Los Guardianes de la Galaxia, la cosa mejora bastante. Nos encontramos a una Natalie Portman que, por primera vez, parece sentirse cómoda en la piel de Jane Foster. Nos encontramos a un Christian Bale que interpreta a un Gorr bastante digno, e incluso tenemos al mismísimo Russell Crowe como un Zeus que, digamos, resulta muy del estilo de Taika Waititi. No, no es lo mejor de la película, precisamente.

Respecto al propio Thor, lo cierto es que me gustó. Sí, no tenemos al mismo de las primeras películas, ni tampoco al dios del trueno intensamente épico de Los Vengadores: Infinity War, pero tampoco a las versiones ridículas que vimos en Thor: Ragnarok y en Thor: Endgame. Se trata de un personaje que combina de forma bastante aceptable la seriedad del primero, la épica del segundo y cierto toque cómico derivado del tercero, lo que da un resultado digno, que ya es mucho decir.

La película, si ha de ser juzgada como adaptación de los arcos argumentales de Gorr y Jane Foster como Thor en los cómics, deja mucho que desear. También es verdad que adaptar siete años de cómics en dos horas es absolutamente imposible. Pero si nos olvidamos de eso y valoramos la película por sí misma, lo cierto es que se convierte en la mejor adaptación cinematográfica del personaje hasta la fecha. La historia del propio Thor, una historia de dolor y de pérdida que comenzó con la muerte de su madre en Thor: The Dark World y que le llevó a perder todo y a todos a lo largo de las siguientes películas, desemboca finalmente en Thor: Love & Thunder, película que sirve para, digamos, rehabilitar al personaje y permitirle curar sus heridas, que son muchas. Emocional y más profunda de lo que parece, Thor: Love & Thunder ha hecho un trabajo digno con el personaje. Así que, si aún no lo habéis hecho, id a verla. Vale la pena.

Y luego están las cabras. Odín bendiga a esas cabras.

JOAQUÍN SANJUÁN