The Sandman, de Neil Gaiman (tomos 6 al 10)

- ARTÍCULO PATROCINADO POR LA TIENDA DCOMIC DE VALENCIA -

¡Bienvenidos una vez más a GRIMNIR.ES! Hoy os traigo la reseña del cómic The Sandman de Neil Gaiman, en concreto los tomos seis a diez de la serie, es decir, la segunda parte de la misma. ¡Podéis encontrar la reseña de los cinco primeros tomos AQUÍ! Este artículo está patrocinado por la tienda DComic de Valencia, en la que podréis encontrar novelas, cómics, juegos y mucho más. ¡Además, si al hacer tu pedido dices que vas de parte de grimnir.es recibirás un 5% DE DESCUENTO! Podéis encontrar un banner de la tienda al final del artículo; solo tenéis que hacer clic sobre él para acceder a la página web de DCOMIC. ¡Que no se os escape ese descuento! Y ahora, ¡dentro artículo!  

6. Fábulas y reflejos (Vértigo preview 1, Sandman special 1, The Sandman 29-31, 38-40, 50).

Estamos ante un número de concepción extraña, y cuya condición queda perfectamente reflejada por su título. En Fábulas y reflejos, Neil Gaiman nos ofrece diversas historias breves que sirven como delicioso complemento al resto de tomos. No hay más que ver los números que se incluyen en este tomo para advertir su condición de recopilatorio de breves cuentos. Esto es, a fin de cuentas, lo que mejor se le da a Gaiman: contar cuentos.

Un escritor de teatro. Una cabeza en la Revolución Francesa. Un emperador romano que quiere ser mendigo. El primer y único emperador de Estados Unidos. Una historia de amor entre cazadores sobrenaturales. Marco Polo cruzando un desierto. La más triste canción de Orfeo. Un niño en el Sueño y el parlamento de los grajos. Alá.

Todo eso y más es lo que contiene este tomo, un tomo diseñado para ser leído despacito y con atención, pues rezuma magia en cada una de sus historias.  

«[Cuando, en un sueño, caes], a veces te despiertas. A veces te mata la caída.
Y a veces, cuando caes, vuelas».

7. Vidas breves (The Sandman 41 a 49).

El séptimo tomo de The Sandman es en su mayor parte una road movie, un viaje por carretera (más o menos) en el que los dos protagonistas principales son el mismísimo Sueño y su adorable aunque desconcertante hermanita Delirio, otra de los Eternos. El viaje, que tiene como objetivo encontrar a Destrucción, hermano de ambos y también un Eterno, los conducirá por muy diferentes lugares, siempre en busca de aquellos inmortales conocidos por Destrucción, con la esperanza de que alguno de ellos tenga algún indicio que permita a Sueño y a Delirio encontrar a Destrucción, el Eterno que renunció a ocuparse de sus responsabilidades y se marchó a vivir su vida a su manera.

El viaje emprendido por los dos hermanos, extraña pareja donde las haya, tendrá como destino inesperado cierta evolución personal por parte de ambos, así como la resolución de algunas cuestiones, tales como el destino de Orfeo, hijo de Sueño, que estaban todavía pendientes de ser resueltas. Al final del tomo, tanto Destrucción como Delirio e incluso Orfeo encontrarán la paz. Respecto a Sueño... bueno, su camino aún no ha terminado.  

«Pienso que eres muy simpática. Y que centelleo es una palabra bonita. Y veronés.

Una vez conocí a una señora que tenía un pez imaginario».

 8. El fin de los mundos (The Sandman 51 a 56).

Estamos ante uno de los tomos más espectaculares de The Sandman. Este volumen, el número ocho, también es, con tan solo seis números, uno de los más breves de la colección. Neil Gaiman utiliza una vieja técnica narrativa, la de las historias encuadradas dentro de otras historias, a lo largo de un arco argumental que abarca los seis números del recopilatorio. Este consiste básicamente en la accidental reunión de un puñado de seres de diferentes realidades, quienes, a causa de algún extraño suceso que no son capaces de identificar, se encuentran en un peculiar lugar, la Posada del Fin de los Mundos, situada en ningún lugar y en ningún momento, y, al mismo tiempo, en todos los lugares y momentos habidos y por haber.

Los cinco primeros números ofrecen diferentes historias, que al mismo tiempo contienen historias, que también contienen historias. Recurso, como decía, utilizado desde hace siglos (el propio Cervantes lo emplea en su Quijote), y que Neil Gaiman utiliza con absoluta maestría. En el último número, el desenlace del arco argumental, podemos disfrutar además de la aparición de los Eternos, quienes se convierten en la causalidad que ha provocado que todas esas criaturas, humanos y de otras especies, se reuniesen en la taberna. Para algunos de ellos las cosas nunca volverán a ser iguales después de la experiencia.  

«Si la ciudad estaba soñando, entonces la ciudad está dormida.

Y a mí no me dan miedo las ciudades dormidas que se extienden inconscientes

alrededor de sus ríos y estuarios, como gatos a la luz de la luna.

Las ciudades dormidas son dóciles e inofensivas».

  9. Las benévolas (The Sandman 57 a 69, Vertigo Jam 1).

Este volumen, el penúltimo de la colección, tiene la característica de que es el más largo de todos los que conforman la colección, con un total de trece cómics recopilados, número que duplica el de otros tomos, como el octavo o el décimo.

Este tomo es en muchos sentidos el desenlace de la historia que Neil Gaiman nos cuenta en The Sandman, mientras que el último hace una función más bien de epílogo. Teniendo esto en cuenta no es de extrañar que la mayor parte de la narrativa tenga lugar en El Sueño, y el lector pueda encontrarse de nuevo no solo con la mayoría de los personajes secundarios que orbitan en torno al protagonista, The Sandman, sino también con sus hermanos, quienes de nuevo harán su aparición en estas páginas.

El momento cumbre de Las benévolas tiene lugar entre Sueño y su hermana Muerte, y supone el renacimiento del personaje, su muerte y nuevo nacimiento como un Sueño diferente pero, al mismo tiempo, muy parecido.

«Estoy cansado, hermana. Muy cansado».

  10. El velatorio (The Sandman 70 a 75).

El velatorio pone el cierre a la extraordinaria historia de The Sandman, y lo hace con un tomo que solo podía titularse El velatorio.

La mayor parte del tomo se centra en los amigos y compañeros de Sueño, y, sobre todo, en sus hermanos. Unos y otros tratan de asimilar lo mejor posible lo sucedido, y de comprender qué fue lo que llevó a Sueño a hacer lo que hizo. Mientras tanto, un nuevo Sueño ha ocupado su lugar, cosa que resulta aún más desconcertante para algunos.

El cierre de The Sandman ofrece un flash-back a un encuentro entre Sueño y el mismísimo William Shakespeare, figura histórica con la que ya se había encontrado el lector en esta misma historia. En dicho encuentro, Sueño explica a Shakespeare que él, pese a que es el Príncipe de las Historias, nunca tendrá su propia historia. El hecho de que el flash-back tenga lugar tras la extensa historia de Sueño narrada en The Sandman, y el hecho de que el cómic termine con unas palabras del propio Shakespeare, forman la guinda de tan magnífica obra.

«Soy el Príncipe de las Historias, Will, pero no tengo historia propia. Nunca la tendré»

JOAQUÍN SANJUÁN